En el “ámbito romántico” -perdón si suena un cheesy-, el 'ghosting' ocurre cuando la persona con la que hemos estado chateando o pasando tiempo en la vida real de repente deja de comunicarse e incluso nos bloquea. Pero aquí está lo interesante: sin despedirse ni dar ninguna explicación.
Y como en el mundo laboral, la relación empresa/talento es casi como una relación romántica llena de expectativas, emoción, superación y drama, el término se ha popularizado en el entorno de la contratación de personal: "Ghosting en la contratación". En este caso, es cuando una empresa de selección deja de comunicarse con un candidato después de una entrevista o un largo proceso. Leemos muchas publicaciones al respecto aquí en LinkedIn.
Sin embargo, algo de lo que casi nunca se habla es del “Ghosting de candidatos”, cuando es el candidato quien desaparece sin dar explicaciones durante el proceso de contratación o, peor aún, no se presenta el día de la firma del contrato, te deja en visto o te bloquea.
Según una investigación realizada por LinkedIn en el Reino Unido, el 95% de los reclutadores encuestados afirmaron haber experimentado el 'ghosting' de un candidato en algún momento de su carrera como gestores de contratación.
Un artículo que leí en estos días de España me aterró, decía: El alza del 'ghosting' laboral: “El primer día de trabajo ya no se presentan”. Al menos uno de cada diez aspirantes a un puesto de trabajo desaparece sin previo aviso.
Ese candidato que durante las entrevistas fue amable y participativo, dedicó tiempo a presentar pruebas técnicas e incluso completó exhaustivos procesos administrativos, a veces llegando a gestionar hasta una visa en algunos casos. Cuando uno ya está todo ilusionado, de repente, un día deja de responder llamadas y mensajes. Desaparece en el aire, como un fantasma, incluso cuando WhatsApp indica que está en línea. Y deja al reclutador pensando: "¿Fui yo? ¿Qué hice mal?"
Además, el "Candidate Ghosting" tiene un impacto muy negativo en otros candidatos interesados en el mismo puesto. Ellos también han invertido tiempo, energía, ilusiones e incluso dinero. Algunos hasta pueden haber rechazado otras ofertas laborales menos interesantes esperando por esta oportunidad que la empresa decidió darte a ti y tú no aprovechaste.
La búsqueda de empleo se basa en la confianza, la empatía, la honestidad y el carácter. Estas cualidades son fundamentales y van más allá de los conocimientos y la experiencia. Reconozco que tú también puedes haber sido víctima del 'ghosting', incluso por nuestra parte (En nuestra defensa, ten presente que al día recibimos muchas, muchas postulaciones y atendemos muchos, muchos procesos). No obstante, que esta sea una oportunidad para disculparme por ello.
Sin embargo, déjame darte un consejo aunque no lo hayas pedido: si has solicitado un trabajo y la empresa no te ha respondido, no dudes en ponerte en contacto y preguntar si aún están interesados en saber de ti. Si lo están, ¡fantástico! Y si no lo están, puedes seguir buscando mejores oportunidades y continuar con tu vida, incluso aprovechando la experiencia para aprender lo que deseas y no deseas de un posible empleador.
Pero si fuiste tú quien perdió el interés, también te animo a que te manifiestes y te despidas, dejando las puertas abiertas. Y si es tu primer día y te están esperando, con mayor razón, por favor, ¡contesta el teléfono o responde el WhatsApp! El mundo ya tiene suficientes problemas con personas que constantemente incumplen sus promesas, ¿por qué contribuir a esas cifras?
Como candidato, es tu responsabilidad mantener tu palabra y ser honesto con las empresas con las que te entrevistas o con las que estás en proceso de contratación. Y como reclutadores, sabemos que siempre podemos mejorar y estamos abiertos a recibir sugerencias. En otras palabras, deberíamos hacer un trato: ¡No más Ghosting!